"Si tuviera que perecer dos veces..."
He estado trabajando desde el mes de diciembre en darle cuerpo a un libro de poesía. Ahí como quien no quiere la cosa, aquel libro de 20 poemas tallereados con Raúl Rincón, fue creciendo de manera lenta y a cuenta gotas durante varios años. A ver, fueron ¿cuántos?... Empecé a tallerear en el 2002 y hasta el 2004. Después abandoné como por 5 años. Retomé la escritura y lectura de poesía como en el 2010. Joder, ¿tanto tiempo? Y sí, fue la lectura lo que me trajo de vuelta al redil. La lectura obligada de las clases. Desde López Velarde hasta los reencuentros con Huidobro y Vallejo. Y también los descubrimientos acumulados en esos años. José Eugenio Sánchez, José Vicente Anaya, Alejandra Pizarnik, A. E Quintero. Entre otros más. Siempre he amado la poesía. En neta lo digo. Pero no me siento poeta-poeta. Así como no me siento historiadora-historiadora. Ni narradora-narradora. Es más: no me siento nada-nada. Pero sí soy una gran lectora. Sí me creo una amante lectora. ...